Diario de Hallstatt
El día empezaba bien temprano en la estación central de Viena. Mi siguiente destino era la preciosa y maravillosa Hallstatt. Viaje con la compañía de tren obb (Puedes conseguir el ticket aquí), un viaje de 3 horas y algo. El tiempo no acompañaba del todo dado, que se pegó todo el día lloviendo.
Cuando se acercaba el tren a la zona de Hallstatt, ya se notaba la preciosidad de la zona en los pueblos cercanos. Pueblos de montaña con preciosos lagos… Deja volar tu imaginación o viaja a la zona ya!!. ¿A qué esperas?. Un lugar de cuento totalmente.
El tren te deja en una pequeña estación al otro lado del pueblo de Hallstatt. Para cruzar el lago y llegar al pueblo, tienes que coger un barco, lo encuentras justamente cuando bajas de la pequeña estación de tren, el precio del mismo es de 3 euros ida y 3 euros vuelta. Los tickets se los compra a la misma tripulación del barco.
Una vez cruzado el lago llego a la preciosa Hallstatt. Nada más bajarme del barco me quedo alucinado con tanta belleza del pequeño pueblo de las montañas de Austria.
Mi primera parada fue el famosísimo mirador donde se obtiene una de las mejores postales de Hallstatt, justamente según te bajas del barco giras a la derecha y subes una cuesta, no tienes perdida.
El siguiente paso fue llegar hasta la imponente iglesia de Maria am Berg, en la cual también obtienes unas preciosas vistas del maravilloso pueblo. En sus alrededores se encuentra el cementerio, así que por favor ser respetuosos en el lugar.
Luego baje por unas escaleras que prácticamente volví casi a la misma plazita donde se encuentra el pequeño muelle, al lado se encuentra la iglesia de Lutheran Church. Justo detrás hay un pequeño parque llamado Spielplatz, y un pequeño muelle donde obtienes unas preciosas vistas del lago.
El siguiente destino fue la plaza central, donde puedes realizar unas preciosas fotografías. Con la vegetación propia de la zona, el entorno de la plaza es espectacular con las casas típicas pintadas con colores agradables adornadas con flores en sus ventanas, y una estatua central de la Santísima Trinidad.
En la calle Bardergraben obtienes unas preciosas vistas de una cascada de agua que baja desde las altas montañas.
Un poco más abajo puedes encontrar una pequeña cabaña donde hacen unos dulces riquísimos de hojaldre relleno de merengue, allí mismo hacen el hojaldre y rellenan el dulce. El precio fue de 2 euros.
Paseando por la calle Seestrabe, verás a tu izquierda el precioso lago de Hallstatt donde puedes ver unos preciosos cisnes y patos y a la derecha podrás disfrutar de las tiendas. Para comprar unos detales de la zona.
Sin duda Hallstatt es un lugar de cuento, donde la visita es totalmente obligatoria si te encuentras en Austria. Lo mejor del pueblo es perderte por todas sus calles y callejuelas, disfrutar de sus maravillosas vistas al lago, sentarte y contemplar las maravillosas siluetas de las montañas llenas de vegetación.